Tarjeta monedero

El sistema permitía a los usuarios pagar más rápido que con efectivo y las transacciones se hacían en menos tiempo.

[2]​ La tarjeta monedero contenía un chip electrónico que se recargaba con dinero y permitía pagar productos y servicios deslizando la tarjeta en el lector cuyo importe exacto se descargaba del chip.

Para no quedarse sin saldo era recomendable vincular la tarjeta a una tarjeta de crédito o débito, y de esta manera el monedero se podía recargar automáticamente.

Ya en 2015, las agencias bancarias que aceptan moneda y billetes son la excepción y al hacer cada depósito se debe justificar la proveniencia del dinero.

Para convertirse en una sociedad sin dinero efectivo Suecia debe todavía implementar opciones para una parte de su población que no utiliza medios de pago electrónico, tales como ancianos no familiarizados con la tecnología, indigentes e inmigrantes ilegales.