King of the United Kingdom of Great Britain and Northern Ireland (inglés)Rìgh na Rìoghachd Aonaichte na Breatainn Mhòr agus Eirinn a Tuathcódigo: gla promovido al código: gd (gaélico escocés)Brenin Teyrnas Unedig Prydain Fawr a Gogledd Iwerddon (galés) La Corona británica es una institución monárquica del tipo constitucional, cuyo titular, el monarca británico o soberano, es el jefe de Estado del Reino Unido y de los territorios británicos de ultramar.
La monarquía británica actual puede remontar su linaje ancestral al período anglosajón y, por último, más atrás a los reyes de los anglos.
Este último tomó una controvertida decisión al proclamar a su hija Matilde (la única superviviente) como su heredera.
Enrique II debió hacer frente a rebeliones lideradas por sus propios hijos, los futuros monarcas Ricardo I y Juan.
Sin embargo, los triunfos en ese país dieron un retroceso durante el reinado de su sucesor, Eduardo II, quien también se vio acaparado por un desastroso conflicto con la nobleza.
El nuevo monarca pronto reclamó la Corona francesa, iniciando la Guerra de los Cien Años que enfrentó a Inglaterra y Francia.
Su reinado fue también marcado por el desarrollo del Parlamento, que se había dividido en dos Casas por primera vez.
Finalmente, el conflicto terminó con éxito para la rama lancasteriana, liderada por Henry Tudor (Enrique VII) en 1485, cuando Ricardo III fue asesinado en la batalla de Bosworth Field.
Su fallecimiento en 1558, abrió paso para que su media hermana Isabel I la sucediera, devolviendo a Inglaterra al protestantismo.
La expansión de los dominios escoceses continuó durante los dos siglos siguientes, debido a que otros territorios como Strathclyde eran subyugados u obtenidos mediante matrimonio dinástico.
De esta forma, cuando Donnchad I sucedió a Máel Coluim II en 1034, lo hizo como tanista, sin oposición alguna.
Este, así como su sucesor Alejandro III, intentaron hacerse con las islas occidentales, que se encontraban aún bajo el poder de Noruega.
En 1513, Jacobo IV inició una invasión a Inglaterra, intentando tomar ventaja de la ausencia del rey inglés Enrique VIII.
El nuevo Lord Protector demostró poco interés en gobernar, por lo que pronto abdicó, dando lugar al breve restablecimiento de la Mancomunidad.
El Proyecto de Exclusión, sin embargo, fracasó en numerosas ocasiones en las que Carlos II disolvió al Parlamento por temor a su aprobación.
El rey muere poco después de la expedición del Acta, dejándole la corona a su cuñada Ana.
Por este motivo, Jorge I delegó gran parte de su poder en los ministros, especialmente en sir Robert Walpole, a quien se le suele considerar como el primer ministro —no oficial— del Reino Unido, siendo en ese momento el nuevo Jefe del Gobierno.
Al mismo tiempo, el rey no perdió oportunidad en reclamar la Corona francesa, algo que ya había ocurrido con todos los monarcas ingleses desde Eduardo III.
Para ese entonces, el rey Enrique VIII de Inglaterra había roto con la Iglesia Católica y puesto al país a merced del protestantismo.
Sus poderes vienen determinados por las constituciones nacionales o por las leyes británicas en el caso de territorios dependientes del Reino Unido.
Si ningún partido alcanza la mayoría (un hecho poco común dado el sistema electoral británico de First Past the Post), dos o más grupos podrán formar una coalición, donde el líder establecido por acuerdo unánime será nombrado primer ministro.
Actualmente, Irlanda del Norte no posee un gobierno delegado; su Asamblea y el ejecutivo se han visto suspendidos.
No obstante, debido a que la monarquía británica es constitucional, el monarca ejerce la prerrogativa real bajo consejo de los ministros.
Antes de que una carta o proyecto pueda convertirse en ley, se requiere el Asentimiento Real, esto es, la aprobación del monarca.
El soberano puede negociar o ratificar tratados, alianzas, y acuerdos internacionales, para lo que no se requiere aprobación parlamentaria.
Antiguamente, el monarca corría con todos los gastos oficiales a partir de ingresos hereditarios, incluyendo las ganancias del patrimonio real.
Como la lista civil y los auxilios económicos se emplean solo para gastos oficiales, no son tenidos en cuenta en el momento de calcular impuestos.
Este es el sitio donde tienen lugar los banquetes de Estado, las investiduras, los bautizos reales, y otras ceremonias.
Las residencias mencionadas anteriormente pertenecen a la Corona; se mantienen en fideicomiso para futuros gobernantes, y no pueden ser vendidas por el monarca.
No obstante, se estableció que los futuros monarcas usarían el más alto de los números ordinales ingleses y escoceses.