Mirandolina

La llegada del caballero de Riprafratta, un alto aristocrático y un misógino que desprecia toda mujer, rompe el equilibrio instaurado en la hostería.

Mirandolina, aferrada a su orgullo femenino y no estando habituada a ser tratada como una sierva, se propone hacer que el caballero se enamore de ella.

Su desprecio por el sexo femenino lo vuelto vulnerable frente a la malicia de esta mujer, ya que no conociendo las armas de los enemigos, no se ha podido defender.

El caballero, enfrentado por sus dos sentimientos totalmente distintos, no quiere demostrar que fue atraído por una mujer, pero quiere ansiosamente tener a la locandiera para sí mismo y está dispuesto a usar la violencia para conseguir su fin.

Con una hábil estratagema, Mirandolina calma las ansias de los nobles y se casa con Fabrizio, que siempre la ha amado, y se promete, además, no jugar más con el corazón de los hombres.