Se cree que este cultivo se domesticó en la región del Asia Menor, a partir de un fruto salvaje local.
Mientras que la variedad de Metz es más pequeña, menos dulce y sin manchas rojas en la piel, la variedad llamada de Nancy es más apropiada para su consumo fresco por ser más dulce.
En España se cultiva en Galicia en O Rosal, un valle del sur de la provincia de Pontevedra en el que fue introducido hacia mediados del siglo XX por Xosé Sánchez García y en donde se ha aclimatado a la perfección.
Pero también se fabrican y comercializan conservas y licores, en especial un destilado elaborado por Pazo de Valdomiño en su destilería de Goián.
Fuera de Francia esta fruta es escasamente conocida, debido en gran parte a que su producción se destina casi exclusivamente a la elaboración de otros productos, entre los que destacan: