En caso de muerte o renuncia del presidente Putin, será la persona que le sucederá.
[2] Su nombramiento fue calificado de "selección sorpresa" por el periódico estadounidense The Washington Post.
En 2008, dejó el servicio civil por su cuenta y volvió a los negocios, esta vez en el campo de la inversión.
[7] En 2010, Mijaíl Mishustin fue nombrado jefe del Servicio Federal de Impuestos.
Mishustin apoyó la simplificación de la interacción entre empresas y ciudadanos con las autoridades fiscales.
Como resultado, el número de auditorías fiscales en el sitio ha disminuido drásticamente, mientras que su eficiencia ha aumentado.
[20] Durante su discurso previo a la votación, Mishustin desglosó las prioridades de su futuro trabajo, destacando que el nuevo Gobierno deberá centrarse en la implementación cualitativa de proyectos nacionales e invertir en infraestructuras.