Establecida su familia en Buenos Aires desde 1870, cursó allí sus estudios primarios y en 1883 se trasladó a Francia, estudiando en la École d'agriculture de Grandjouan (Loire-Atlantique),[1] donde se graduó de ingeniero agrónomo en 1886.
[2] Regresó a la capital argentina en 1889 y se integró al grupo del viejo Ateneo, trabando amistad con Rubén Darío, quien le dedicó, conjuntamente con Angel de Estrada, su libro Los raros,[3] y en Prosas Profanas el poema Canto de la sangre.
[5]Dedicado paralelamente a la explotación agrícola-ganadera en las propiedades familiares, construye en 1894 el casco de la estancia La Corina en Santa Fe, que perdura en la actualidad.
[2] Fueron publicadas varias de sus obras:en 1915, Las Epopeyas (traducida al italiano), compuesto por capítulos que tratan del ciclo indio, la Ilíada, la Eneida, la Jerusalén libertada, el Kalevala, los Nibelungos, los niños y los ancianos de la Biblia, los huisiadas, la Divina Comedia, y el Quijote.
Estas páginas fueron prologadas por Leopoldo Lugones, quien expresó: Miguel Escalada fue esa cosa exquisita y discreta que resulta, ante todo, fenómeno de sensibilidad bajo la apariencia artificial de la cultura, incorporada al ser hasta constituir la segunda naturaleza: un esteta...
[2] La estación ferroviaria "Miguel Escalada" en la provincia de Santa Fé, recuerda su persona.
Está ubicada en el departamento San Justo de esa provincia, en el ramal C del FC Belgrano Cargas.