La mezuzá consiste en un rollo de pergamino donde están inscritas dos plegarias: la más solemne del judaísmo, «Shemá Israel» (en hebreo, "שְׁמַע יִשְׂרָאֵל", "Escucha, oh Israel")[3] y «Vehayá im shamoa» ("וְהָיָה אִם שָׁמֹעַ", "En caso de que me oyereis").
[4] La mezuzá es albergada en una caja, generalmente cilíndrica, que puede tener muchos tamaños y decoraciones.
Se estila también, aunque con menor celo, colocar las mezuzót (plural de mezuzá) en las puertas internas, excepto baños.
El receptáculo es meramente un medio para procurar la mayor probidad posible, conservándola incólume e intacta.
En el Éxodo, Dios les indica a los judíos marcar las jambas de su casa con sangre de un cordero para que, cuando caiga la plaga sobre Egipto, las casas marcadas no sean visitadas por la desgracia.