Menisco (anatomía)

En esta deformación y este movimiento, hay factores que influyen, tanto activos como pasivos: Factores pasivos: En este movimiento influye el empuje hacia delante que ejercen los cóndilos femorales sobre los meniscos.

Factores activos: Durante la extensión: Los meniscos se desplazan hacia delante gracias a los alerones meniscorrotulianos tensos por el ascenso de la rótula, que además pone en tensión el ligamento transverso.

Durante la flexión: El menisco interno es impulsado hacia atrás por la expansión del músculo semimenbranoso, que se inserta en su borde posterior, mientras que el cuerno anterior se ve impulsado por las fibras del ligamento cruzado anterior.

Este mecanismo es muy frecuente en los futbolistas, explicando las rupturas transversales y las desinserciones del cuerno anterior.

Otro mecanismo es el de distorsión de la rodilla asociando rotación externa y lateralidad externa, que desplaza al menisco bajo la convexidad del cóndilo interno provocando una fisura longitudinal del menisco, una desinserción capsular, o una fisura compleja.

La parte central del menisco puede quedar levantada dando lugar a una lesión denominada asa de cubo.

Cuando un menisco se rompe la parte lesionada ya no sigue los movimientos normales y se puede encasillar entre el cóndilo y la glenoides causando un bloqueo, tanto más acentuado cuanto más posterior sea la lesión meniscal.

La artroscopia ha supuesto un gran avance, ya que ha permitido conocer mejor las lesiones y ha hecho posibles tanto las meniscectomías parciales como las suturas de menisco.

Los meniscos están situados entre la tibia y el fémur .