El megaletoscopio es un mecanismo óptico surgido a partir de la evolución del aletoscopio (patentado en 1861), diseñados ambos aparatos por el suizo Carlo Ponti (fotógrafo) (1823-1893).[2] En 1860, Carlo Ponti, óptico del rey Vittorio Emanuele II di Savoia, creó un aparato denominado aletoscopio, para la visualización de tanto pinturas como fotografías.Las ediciones más especiales y mejor diseñadas de este aparato eran lo que se conocía como megaletoscopios.En las primeras pruebas con este mecanismo, se preparó una serie de fotografías específicas para utilizar con el megaletoscopio.Estas imágenes eran translúcidas y coloridas, a fin de crear unos efectos visuales más dramáticos.