Medicina heroica
La medicina heroica, también llamada teoría del agotamiento heroico era un método terapéutico que abogaba por un tratamiento riguroso de sangrías, purgas y sudoración para provocar en el cuerpo un "choque" dramático y así devolver la salud al cuerpo al recuperar este su equilibrio.Esta teoría médica tuvo su auge dentro de la práctica médica ortodoxa en el periodo que se da en llamar "Era de la Medicina Heroica" (1780-1850),[2] perdiendo credibilidad a mediados del siglo XIX cuando se demostró que los tratamientos más suaves eran más efectivos y cuando comenzó a desarrollarse la idea de los tratamientos paliativos.Si bien existían practicantes dispersos que estaban particularmente ansiosos por realizar un tratamiento agresivo, la medicina heroica no se convirtió en una escuela de pensamiento cohesionada hasta más avanzado el siglo XVIII.El término "medicina heroica" se acuñó a mediados del siglo XIX para describir el uso de estos tratamientos extremos.[6] La medicina heroica se utilizó para tratar a George Washington en su lecho de muerte en 1799.[13] Si bien es fácil discutir y cuestionar las implicaciones éticas de un tratamiento tan severo, es importante recordar que en ese período de tiempo los médicos operaban basándose en lo que era su mejor conocimiento del cuerpo y su fisiología.Hubo voces disidentes en ese momento, pero la medicina heroica siguió siendo una parte importante y legítima de la tradición médica hasta mediados del siglo XIX.