Diseñado por Robin Herd, el material de mallite innovador pero problemático se utilizó en su construcción.
El M2B propulsado por Ford hizo su debut impulsado por McLaren en el Gran Premio de Mónaco que abre la temporada en el campeonato mundial.
Después de aquella carrera, McLaren decidió "parece que vamos a tener que hacer algunos movimientos bastante drásticos en la sala de máquinas", y así para la próxima carrera en Bélgica se usó el motor Serenissima.
Sin embargo, la unidad de reemplazo no proporcionó una solución inmediata, dañando terminalmente sus rodamientos en la práctica.
En el evento final en México, la carrocería trasera fue cortada para ayudar a prevenir el sobrecalentamiento pero el motor falló durante la carrera.