En 1984 Mauricio Vicent tenía veinte años y, harto de un Madrid en plena época de la Movida,[3] viajó a La Habana, donde decidió quedarse a estudiar.
[4] Desde 1991 hasta 2011 trabajó como corresponsal en Cuba del diario El País[4] y de la Cadena SER, además de otros medios internacionales como Radio France Internacional.
Regresó a España en el año 2011 tras la retirada de su credencial de periodista por parte del Gobierno cubano con la justificación de que ofrecía una "imagen parcial y negativa" del país.
[7][4] Después de una breve estancia en Madrid, volvió a La Habana y siguió escribiendo sobre cultura.
Fue finalista del Premio de Periodismo Cirilo Rodríguez en 1999.