Sus textos están influidos por la canción popular o Volkslied.
Su primera obra Tändeleyen und Erzählungen (Galanterías y relatos) fue duramente atacada por la crítica, acusándola de ser estilísticamente, una imitación sin sustancia de poesías muy conocidas.
De 1768 a 1770, trabaja como redactor del periódico Hamburgischen-Addreß-Comptoir-Nachrichten, y así entra en contacto con personajes como Johann Gottfried Herder y Gotthold Ephraim Lessing.
Bajo su dirección logra que el periódico sea conocido en toda Alemania, antes de cerrar en 1775.
Su situación económica fue precaria hasta 1785, cuando obtiene una pensión honorífica por parte del príncipe danés Friedrich, el cual estaba convencido de sus cualidades literarias, y le proporciona un cargo como revisor en un banco de Altona, que le asegura un ingreso sin la necesidad de abandonar su trabajo literario.