[1] Debido a esto, en 2005, la revista The New Yorker lo describió como el hombre más leído del mundo.
A su vuelta a Gran Bretaña abandonó los estudios y, con la aprobación de sus padres, decidió dedicarse al diseño de tipos.
En 1961 consiguió tallar su propia versión de la tipografía seminegrita Dante.
En 1981 Carter junto a Mike Parker fundó Bitstream, una de las primeras empresas de diseño tipográfico digital, que abandonó en 1991 para formar Carter & Cone.
[5] Con esta nueva firma se centró en mejorar la legibilidad de varias tipografías, diseñando para Microsoft y Apple, las conocidas fuentes Georgia y Verdana, creadas exclusivamente para su visualización en monitores de ordenador.