Matronae
[5] En ocasiones se representaban en compañía del Mercurio Celta.[6] Las Matres también aparecen en relieves votivos e inscripciones de otras áreas ocupadas por el ejército romano, entre ellas el sudeste de la Galia, como en Bibracte (ilustración), y también en la cultura romano-celta de Panonia, en forma de relieves similares e inscripciones dedicadas a Nutrices Augustae, encontradas en lugares del imperio romano como Ptuj, en la Baja Estiria.Se las representaba, normalmente, llevando largos vestidos y con un pecho descubierto.La línea entre las, un poco genéricas, Diosas-Madre y las más específicas diosas locales o insulares, como las mencionadas, es muy borrosa, y los antiguos celtas tenían tendencia a adaptar la naturaleza o esfera de una deidad a diferentes tradiciones locales.El culto a las Matres estaba especialmente extendido en las regiones célticas, habiéndose descubierto en Britania diversos restos escultóricos e inscripciones relacionadas con ellas,[8] Galia, Germania, norte de Italia y el norte de España celtíbero.