Masacre del 30 de agosto

Frank hizo contacto a su vez con el Movimiento de Recuperación Revolucionaria con Héctor Fabian.

También participaron personalidades conocidas a nivel nacional como Rufo López Fresquet, Felipe Pazos y Justo Carrillo.

En puntos estratégicos civiles bloquearían las entradas a la capital[3]​ con autos y camionetas para obstruir la entrada de transportes militares e interrumpiría el fluido eléctrico a las 10:00 p. m.[4]​ Ventura Suárez Díaz sería el encargado de las operaciones en la capital.

[5]​ El plan era tomar las estaciones de policías y pequeñas estaciones militares en toda la isla y distribuir armas a elementos civiles contrarios al régimen.

[9]​[12]​ Sara Rodríguez, madre de los conspiradores Carlos y Juan Salabarria fue detenida para obligarla a confesar el lugar donde se escondían sus hijos, pero antes de confesar se suicidó.