Marta Soler
[3] Su formación futbolística comenzó cuando era chica y entrenaba en una canchita construida junto a su padre en el Delta del Tigre.Su plantel no contó con ningún apoyo oficial, de modo que por las noches se dedicó a cantar tangos y boleros en el restaurante situado al lado del hotel donde concentraba su equipo.Así pudo conseguir dinero para hacer frente a los gastos del viaje.[7][8][9][10] Su carrera como futbolista concluyó en 1978,[1] con una victoria de su equipo en la final del Torneo de Fútbol Femenino gracias a un gol que metió en la definición por penales.[11] En la actualidad se dedica a jugar al tenis criollo[12][13] y sigue cantando tango.