Es considerado piedra angular del sonido neoyorkino y una obra maestra.
El centro de atención es la forma en que se entrelazan las guitarras de Tom Verlaine y Richard Lloyd.
Si bien en el momento de su lanzamiento el álbum alcanzó el puesto número 28 en la lista británica y no vendió muchas unidades en Estados Unidos, Marquee Moon ha sido aclamado universalmente por la crítica, convirtiéndolo en un álbum de culto dentro la escena underground y uno de los pilares fundamentales de la escena de Nueva York.
En 2003 el álbum fue considerado por el New Musical Express como el cuarto mejor disco de todos los tiempos, en el mismo año la cadena televisiva VH1 lo colocó en puesto número 83 de los mejores discos de la historia.
La reedición mantuvo el orden de las ocho canciones originales pero alargó la versión original del tema que da título al álbum, haciendo que el tema llegue a los 10':40" de duración (cuando en el LP original terminaba en 9':54").