Como integrante de Colo-Colo, entre los años 1955 y 1967, ganó varios títulos del torneo nacional chileno.
También a nivel de selección nacional dirigió la sub-16 que compitió el Campeonato Sudamericano en 1988.
Obtuvo su libertad al ser rescatado gracias a gestiones de Francisco “Chamaco” Valdés.
Alberto Fouillioux, su compañero en el equipo que obtuvo el tercer lugar en la Copa del Mundo que se realizó en Chile, lamentó profundamente su pérdida y lo recordó con gran admiración.
Decía Tito Fouillioux: «Se me viene de inmediato a la mente su apodo el "súper clase".