Maria Josephine de Hohenfels fue una noble alemana, hija ilegítima del emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Carlos VII.
Como resultado de esta relación, Maria Josephine tuvo otro hermano: el conde Franz Ludwig von Holnstein (1723–1780), general al servicio del elector de Baviera.
[3]Charles d'Albert, duque de Luynes la describió con ocasión de su presentación a la reina de Francia, de la siguiente manera:elle est blanche, a une jolie taille, un bon maintien; elle est plutôt laide que jolie, cependant elle ne déplaît point.
(en español, es blanca, con una bonita cintura y una buena postura; es más fea que bonita, pero no desagrada.
[4][5][6] Tras el estallido de la Revolución Francesa, partió a Baviera junto con su hija.