Fue discípulo de Paul Gilson y de Paul Dukas, y cofundador del grupo de sintetistas, que representó una tendencia moderna de los años 1925-40.
Ejerció como crítico musical en el Peuple y después en la Nation belge.
De 1949 a 1966 dirigió el conservatorio de Bruselas.
Fue uno de los pocos compositores de su generación que escribió una música directa, lírica, nunca sistemática, pero sometida a las necesarias leyes internas.
Su carácter se demuestra en lo explosivo de su orquestación y su cuidado de la forma.