María Lorenza Barreneche
En 1955 acompañó a su marido en una comida de recibimiento que ofreció la comunidad vasca al lehendakari José Antonio Aguirre, que se mantuvo durante sus 23 años de mandato en el exilio.[3] Fue calificada por diversos medios gráficos como la primera dama con más bajo perfil de la historia democrática argentina.Durante el mandato de su marido, la vestía la reconocida modista Elsa Serrano y tuvo poca exhibición ante los medios.En su trabajo se destacó por su discreción y representó las ideas tradicionales de la familia e incluso, realizó una campaña contra la drogadicción.[7] En marzo de 2009, al fallecer su esposo, el expresidente Raúl Alfonsín, no pudo concurrir al funeral ni a la misa de cuerpo presente debido a su delicada salud: Barreneche padecía problemas de visión y serias dificultades para caminar que la obligaron a utilizar andador.