A pesar de los malos augurios que algunos vecinos le vaticinaban, el negocio properó y le mantuvo durante 53 años, hasta que se jubiló.
[7][8] Fue construido entre 1520 y 1550, sustituyendo una mansión previa del siglo XV.
Por su cuenta realizó varias intervenciones de consolidación y restauración.
En 1997 se realizaron tareas de restauración, siendo limpiada y consolidada su magnífica fachada.
Fruto de ese acuerdo alcanzado entre la donante, María Forcada, y el ayuntamiento, se dio el siguiente paso al constituirse la Fundación María Forcada, que sería la encargada de gestionar el centro y de hacer cumplir los objetivos marcados.