[1] Habiendo estudiado en el Colegio Católico de San Ildefonso fue su director años después, en 1869, al concluir la gestión de su antecesor, Crescencio Carrillo y Ancona.
Fue también fundador de la Sociedad Minerva, grupo de intelectuales que ejercieron gran influencia en las letras peninsulares.
Nicolín Echánove escribió el editorial que sirvió de nota introductoria del periódico.
[1] Trasladó su residencia a la Ciudad de México en donde estableció un bufete que alcanzó gran prestigio durante el porfiriato.
Mantuvo relaciones de amistad y vínculos cercanos con la intelectualidad del país; cabe mencionar la que sostuvo con su paisano Justo Sierra Méndez más tarde rector de la Universidad Nacional Autónoma de México.