La comprensión moderna del manto superior de la Tierra es que hay dos componentes distintos: la parte litosférica y la astenosfera.El límite entre estas dos capas tiene una base reológica y no es necesariamente una función estricta de profundidad.La litosfera arquea se agota fuertemente en los indicadores de fusión fértil como CaO y Al2O3.[1] Los elementos traza son abundantes en la litosfera arquea en relación con MORB (que toma muestras del manto superior moderno) y han sido muestreados por la datación por isótopos Re-Os de peridotitas y ofiolitas.Si la conexión entre la corteza continental y el manto litosférico subcontinental no existe, y más bien un proceso de la Tierra diferente formó ambos depósitos, entonces complica aún más los mecanismos de cómo se formó el manto subcontinental arqueo.