Mantecadas de Astorga

[1]​ Aparecen documentadas en 1805, con Máximo Matheo y Francisco Calbo como sus primeros artesanos, quienes las elaboraban por encargo del Seminario de Astorga.Según José Antonio Fidalgo Sánchez, su antigüedad se fecha en 1809, en el momento de la invasión francesa.Sin embargo, tardarían un tiempo en asentarse, ya que los primeros obradores no se fundaron hasta mediados de ese mismo siglo.Sus hijos Magín y Delfín continuarían luego la tradición familiar, al tiempo que aparecían nuevos fabricantes.[1]​ Se suelen tomar, por ejemplo, como parte del desayuno o de la merienda.
Mural dedicado a las cajilleras en Astorga