También son varios los pequeños arroyos que, desde los montes situados en la parte oriental del municipio, acaban desembocando en el Tuerto.
El terreno es surcado igualmente por numerosas acequias que se utilizan para el riego de los cultivos.
Un poco más adelante, en el siglo VIII, la leyenda de Santo Toribio, que huye de Astorga y no para hasta el alto del Crucero, parece querer decir que donde se asienta hoy San Justo no existía aún un lugar donde alojarse.
Por otra parte, el nombre del pueblo (San Justo) alude a los mártires Justo y Pastor; la fama de estos se extendió gracias a los calendarios litúrgicos mozárabes y visigodos.
A mediados del siglo XX, la población residente alcanzó la cifra más alta, pero a partir de los años sesenta, y al igual que ha sucedido en muchas otras poblaciones del medio rural, se ha ido produciendo un descenso continuado del censo como consecuencia del envejecimiento de la población y la escasez de nacimientos, aunque moderado debido a la riqueza agrícola de la zona que permite mantener una población estable.
Por último, cuenta con varios viales de carácter local que comunican la cabecera del municipio con sus pedanías.
[11] Los cultivos en el municipio son los propios de la meseta, encontrándose cereales, maíz, patatas, remolacha, lúpulo y forrajes.
Actualmente este sector, al igual que en muchos otros municipios, está en retroceso.
En cuanto a la ganadería, cuenta con vacuno de carne, ganado ovino y porcino .
Antiguamente existían los oficios de cardadores, tintoreros y tejedores, ya desaparecidos, pero aún se puede encontrar una industria textil, la AIPTESA.
Todos ellos están regidos por Juntas Vecinales que administran los bienes de cada pueblo y convocan los concejos para tratar distintos asuntos.
[18] San Justo cuenta con un centro de educación infantil y primaria (El Crucero), dependiente del CRA Vegacemar, centralizado en el mismo colegio.
Sobre ésta, del edificio original, construido en el siglo XVI, solo se conserva la torre con su espadaña.
Además de la Santa Vera Cruz, otros pasos procesionales son la Oración en el Huerto (1848), San Juan Evangelista (1829), La Flagelación (siglos XVI-XVII), Santa Verónica (antes de 1829), Jesús Nazareno (1829), Virgen Dolorosa (principios del siglo XIX), Santo Sepulcro (principios del siglo XIX), Virgen de la Soledad (2002) y El Resucitado (2006).
A lo largo del año son varios los eventos festivos y culturales que tienen lugar en San Justo.