Mansión de Invierno

Empedrado, fue la localidad en la que se decidió realizar la construcción del hotel, por sus condiciones climáticas y geográficas.

Cuando fue inaugurado en 1914, constaba de cuatro pisos, dos subsuelos y estaba unido a un casino por un largo pasillo.

El hotel sólo duro unos pocos meses, y paradójicamente, no durante el invierno, como había sido planeado.

Cuando inició la Primera Guerra Mundial, el hotel fue abandonado y pocos años después, parte de este fue demolida.

Nunca fue considerado un patrimonio histórico, cultural ni arquitectónico.