[1] Es similar a las variantes que se hablan en las otras islas del archipiélago balear: el ibicenco (eivissenc) en Ibiza y Formentera; y el menorquín (menorquí) en Menorca,[2][3] si bien estas variantes no están recogidas oficialmente en el Estatuto de Autonomía de las Islas Baleares y pasan a ser variantes no oficiales.
[4] La lengua catalana se introdujo en Mallorca por los repobladores, tras ser conquistada para la Corona de Aragón en 1229.
Los repobladores procedían de diversos lugares y llegaron en diferentes proporciones.
En 1230 se dictaron las Franquezas de Mallorca, privilegios que atrajeron a más repobladores para cultivar el campo.
Quizá por este origen, la lengua propia de Mallorca es un dialecto oriental del catalán.