Música para cuerda, percusión y celesta

106, BB 114 -[1]​ es una de las obras más conocidas del compositor húngaro Béla Bartók.

La orquestación se compone de dos grupos de instrumentos de cuerda (violines, violas, violonchelos y contrabajos), que se dan la réplica entre sí en lados opuestos del escenario, y a la vez se enfrentan con un grupo central integrado por la celesta, un arpa, timbales, percusión (xilófono, caja, bombo, platillos y tam-tam), así como un piano, utilizado principalmente en funciones percusivas.

La pieza consta de cuatro movimientos, lentos los impares y rápidos los pares, con una duración total de media hora aproximadamente: El primer movimiento es una fuga lenta, cuyos compases cambian constantemente.

El segundo movimiento es rápido, con un tema en compás de 2/4, que se transformará en 3/8 hacia el final.

Se caracteriza por los fuertes acentos sincopados del piano y de la percusión, en una danza vertiginosa, que evoluciona en una extensa sección en pizzicato, con una conclusión al modo de un concierto para piano.

Muestra (solfa).
Muestra (audio).
Parte del segundo movimiento: del compás 200 al 207.
Parte del segundo movimiento: del compás 199 al 207.
Parte del segundo movimiento: del compás 200 al 242.