La mención más temprana de gaitas en Escocia que se conoce data del siglo XV, aunque se cree que habían sido introducidas en Escocia mucho antes, hacia el siglo VI, provenientes de los gaélicos irlandeses.
[4] La música escoesa del final de la Edad Media fue influenciándose progresivamente por los desarrollos continentales, con personajes como el teórico musical del siglo XIII, Simon Tailler, que estudió en París antes de volver a Escocia, donde introdujo varias reformas a la música eclesiástica.
[5] Hay colecciones escocesas de música como la Wolfenbüttel 677 del siglo XIII, asociada con Saint Andrews, que contiene principalmente composiciones francesas, pero con algunos estilos locales peculiares.
[6] El trabajo más importante de la música escocesa reformada fue, probablemente, A forme of Prayers, publicado en Edimburgo en 1564.
[15] Esta tradición continuó hasta el siglo XIX, con figuras de renombre como los violinistas Neil y su hijo Nathaniel Gow.
[22] Hacia finales del siglo XIX se produjo un renovado interés por la música tradicional, con propósitos más académicos y políticos.
[25] Después de la Segunda Guerra Mundial, la música tradicional escocesa fue marginada, aunque se mantuvo como una tradición viva.
[26] Se popularizaron actuaciones como las de John Strachan, Jimmy MacBeath, Jeannie Robertson y Flora MacNeil.
[27] En los 60 floreció la cultura del folk club y Ewan MacColl emergió como líder en este resurgimiento británico.
Five Hand Reel, que mezclaban miembros irlandeses y escoceses, emergió como uno de los más exitosos exponentes del estilo.
No obstante, en Escocia, el circuito de ceilidhs y festivales supuso un apoyo a la música tradicional.
La música en Edimburgo prosperó gracias al mecenazgo de figuras como Sir John Clerk of Penicuik.
[34] El estilo italiano de música clásica se importó probablemente por el celista y compositor Lorenzo Bocchi, que viajó a Escocia en 1720.
[36] Varios músicos italianos estuvieron activos en la capital durante ese periodo y se conocen varios compositores escoceses de estilo clásico, como Thomas Erskine, 6th Earl of Kellie, el primes escocés que compuso una sinfonía.
[39] Burns también colaboró con George Thomson en A Select Collection of Original Scottish Airs, que adaptaba canciones folk escocesas con arreglos clásicos.
[42] Después de la I Guerra Mundial, Robin Orr y Cedric Thorpe Davie recibieron influencias del modernism.
Erik Chisholm fundó la Scottish Ballet Society y contribuyó a la creación de varios balets.
También se ha dicho que Donovan fue una influencia temprana y estimulante para Marc Bolan, fundador de T.
De cualquier modo, no fue hasta la era del post-punk de los tempranos 80 cuando Escocia verdaderamente se hizo patente, con bandas como Cocteau Twins, Orange Juice, The Associates, Simple Minds, Maggie Reilly, Annie Lennox (Eurythmics), Hue and Cry, Goodbye Mr.
Gaiteros como Gordon Duncan y Fred Morrison empezaron a explorar nuevos géneros musicales con muchos tipos de gaitas.
El acordeón también ganó popularidad durante los 70 debido al renombrado Phil Cunningham, cuyo peculiar estilo fue una parte crucial de la banda Silly Wizard.
Una tendencia maś reciente ha sido la fusión de la música tradicional celta con el rock y el jazz.
Sirvan como ejemplo Shooglenifty, Peatbog Faeries, The Easy Club, Talitha MacKenzie, Martin Swan, Savourna Stevenson, Heather Heywood y Christine Primrose.
Otras bandas de metal son Man Must Die, Cancerous Womb, Neonatal Death y Cerebral Bore.
El famoso guitarrista y cantante de Dire Straits, Mark Knopfler, también es escocés, nacido en Glasgow.
Bandas de country dance, como la liderada por el renombrado Jimmy Shand, han ayudado a difundir su imagen.
Más recientemente, intérpretes como Phil Cunningham (de Silly Wizard) y Sandy Brechin han contribuido a la popularización del acordeón en la música escocesa.
Históricamente han existido muchas otras gaitas, recreándose buena parte de ellas en el último medio siglo.
Hacia los 70 del siglo XX resurgieron otros tipos de gaita, como las históricas border pipes y las scottish smallpipes.