Jean-François Lyotard
Entre las muchas influencias que tuvo a lo largo de su carrera se encuentran: Immanuel Kant, Karl Marx, Georg Wilhelm Friedrich Hegel, Edmund Husserl, Martin Heidegger, Maurice Merleau-Ponty, Sigmund Freud, Jacques Lacan, Ludwig Wittgenstein y Giles Deleuze, cuyos trabajos no solo dieron marco a la labor de Lyotard, sino que en muchas ocasiones sirvieron como guía de su pensamiento crítico.[1] De niño tuvo muchas aspiraciones, como convertirse en artista, historiador, fraile dominico y escritor.[4] Sin duda influido por la destrucción y la devastación que había presenciado durante la guerra y atraído por las primeras promesas del socialismo, se convirtió en un devoto marxista en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial.Por ello culminó sus estudios en 1947 con una tesis DES (diplôme d´études supérieures) titulada La indiferencia como un concepto ético (L'indifférence comme notion éthique), donde analizó formas de indiferencia y desapego en el budismo zen, estoicismo, taoísmo y epicureísmo.Como alumno de Maurice Merleau-Ponty, se interesó también por la fenomenología y publicó su primer libro sobre este tema (esencialmente divulgativo) en la colección Que sais-je?, proporcionando una visión clara y global del papel de dicha corriente filosófica en el siglo XX.Con ello, el papel de la crítica y análisis del lenguaje se hace sumamente importante en su filosofía.Por otra parte, y durante esta misma época, realiza importantes incursiones en el ámbito de la estética, concretamente en el análisis de la obra pictórica, a la que ve como un campo determinante en la posición del deseo.En 1971 obtuvo un doctorado estatal con su disertación Discurso, figura bajo la tutoría de Mikel Dufrenne, trabajo que se publicó ese mismo año.Siendo así, en Economía libidinal (1974), La condición postmoderna (1979) y Au juste: Conversations (1979) criticó teorías literarias contemporáneas e incitó a un discurso experimental desprovisto del interés por la verdad.La organización tenía como objetivo realizar una crítica del marxismo desde dentro durante la guerra argelina de liberación.También escribió ensayos llenos de optimismo, esperanza y aliento hacia los argelinos, los cuales fueron más tarde reproducidos en escritos políticos.Lyotard esperaba alentar una lucha argelina por la independencia de Francia y una revolución social.Se distanció más tarde del marxismo porque sentía que este tenía un enfoque estructuralista rígido e imponía la «sistematización de los deseos» mediante un fuerte énfasis en la producción industrial como cultura fundamental.En 1972 comenzó a dar clases en la Universidad de París VIII, donde enseñó hasta 1987, cuando se convirtió en profesor emérito.El trabajo de Lyotard se caracteriza por una oposición persistente a las universalidades, metanarrativas y la generalidad.En este sentido, su obra "La condición posmoderna" provocó el escepticismo acerca de las teorías universalizadoras.Su pérdida de fe en las metanarrativas afectó la manera en que vemos la ciencia, el arte y la literatura.Las pequeñas narrativas se han convertido en la manera adecuada de explicar las transformaciones sociales y los problemas políticos.Un enunciado debe presentar un conjunto de condiciones para ser aceptado como científico.En este caso la legitimación es el proceso por el cual un legislador, que se ocupa del discurso científico, está acreditado para prescribir las condiciones convenidas, generalmente de consistencia interna y de verificación experimental, para que un enunciado forme parte de ese discurso y pueda ser considerado como válido por la comunidad científica.Esto se vuelve más crucial en Au juste: Conversations (1979) y Le Différend (La Diferencia) (1983), que desarrollan una teoría posmoderna de la justicia.Este último es demasiado particular para ser una declaración ética, puesto que cabe preguntarse ¿qué tiene de especial Margaret?.Sólo es ético si se basa en una declaración universal: "no robarás a nadie".En otro caso, hay un conflicto entre dos partes que no se puede resolver de manera justa.Él era, a pesar de su reputación como posmodernista, un gran promotor del arte modernista.Este es un término de la estética cuyas referido a la experiencia de ansiedad placentera que se experimenta al enfrentarse a paisajes salvajes y amenazadores como, por ejemplo, una enorme montaña escarpada, negra contra el cielo, que se cierne ante la visión.Las generalidades, en tanto que conceptos, no prestan la debida atención a la particularidad de las cosas.El término "libidinal" viene de libido, concepto referido a los deseos inconscientes no accesibles desde la conciencia, en la teoría psicoanalítica.Fue este tema en particular donde realmente se opuso a las opiniones de Karl Marx.Las actas fueron publicadas por la Prensa Universitaria de Francia (PUF) en 2001 bajo el título Jean-François Lyotard, l'exercice du différend.