Mediante oposición obtuvo una plaza de medicina forense ejerciendo inicialmente en Aoiz, Villafranca del Bierzo y Estella.
Finalmente obtuvo plaza en Pamplona (1948-1982), donde también ejerció en medicina general, y abrió una consulta particular.
Su extensa producción bibliográfica, a menudo asumiendo los costes de edición y publicación, se puede agrupar, dejando al margen sus novelas, en general, bajo cuatro grandes epígrafes: medicina, biografías históricas, estudios sobre Pamplona y tauromaquia.
Según el crítico literario Fernando Pérez Ollo, este género lo realiza sin rigor metodológico, siguiendo trabajos de otros autores.
[2] Con estas publicaciones «demuestra un trabajo asiduo y directo de la documentación municipal y no se limita a la vida oficial de la ciudad en el siglo XIX, porque dedica monografías a personajes locales y aporta abundantes noticias de primera mano.» En este epígrafe se concentra gran número de publicaciones destacando la de índole local que han merecido mayor eco en el mundo taurino.