[1][2][3] Su nacimiento estuvo rodeado de una acerada polémica, ya que su padre se negó a reconocerlo.
Además su madre fue desgraciada junto con René L'Epinay, gentilhombre y favorito del duque de Orleans.
[7] En su primera juventud fue protegido por su medio hermana, Ana María Luisa de Orléans, la Grande Mademoiselle.
Esta cuenta en sus memorias la belleza del joven y como lo sacó del colegio de los Jesuitas de Tours donde estudiaba.
[13] Tras su muerte en España fue enterrado en la madrileña iglesia de los Santos Justo y Pastor, hoy basílica pontificia de San Miguel.