Su padre Eduardo Squirru, fue agregado civil en China acompañando al primer embajador argentino en ese país, José Arce, y recibió desde niña la educación basada en la cultura oriental.
Ya en la infancia oyó hablar del I Ching, Lao-Tse y Confucio.
Con la colaboración de Carlos Barrios escribió El libro del destino:Kam Wuj: astrología maya publicado por Sudamericana en 2000.
Debutó con Tato Bores y después trabajó con Andrés Percivale con quien aprovechó para introducir el tema del horóscopo chino.
Desde 2003, Ludovica Squirru lidera un encuentro anual llamado Fundación Espiritual de la Argentina.