Luciano Pérez Platero

Nació en Arizaleta (Navarra) en 1882, siendo sus padres Pedro y Petra.Desde los inicios de la guerra civil española fue muy beligerante en favor del bando sublevado.Mientras denunciaba los excesos del bando republicano que describía como «un reguero de crímenes atroces y una estela negrísima de vandalismo y barbarie», no sólo guardaba silencio sobre la violencia de los sublevados en su diócesis de Segovia que él conocía muy bien puesto que en muchas de las ejecuciones asistían sacerdotes para confesar a las víctimas, sino que ordenaba a sus párrocos que todos los días «sin omitir uno solo» elevaran «preces al Todopoderoso a fin de obtener el triunfo total y rápido de España en esta guerra contra la barbarie y el ateísmo».También les ordenaba que los muertos del bando sublevado debían ser inscritos en las partidas de defunción de las parroquias con la frase «peleando por Dios y por la Patria».En 1946 fue designado por Francisco Franco procurador en Cortes, cargo en el que permaneció durante seis legislaturas hasta su fallecimiento.