Con diecinueve años se casó con el poeta Jesús Munárriz, de quien tuvo un hijo.
Junto a su marido, ingresó en el clandestino PCE en 1962, pero lo abandonó tras la invasión de Praga por los soviéticos en 1968.
En 1989 ingresó como independiente en el grupo Izquierda Unida del que salió definitivamente nueve meses más tarde, abandonando así desde entonces la política activa.
También ha participado a menudo en tertulias de radio y televisión.
En muy pocos años el mercado editorial se ha hecho muy extraño, y gran cantidad de escritores se encuentran con la dificultad de escribir con el rigor y la seriedad con que siempre se lo han planteado, porque para muchas editoriales lo que hacen no es comercial entre comillas.