Las episodios sobre el hombre misterioso deben ser evaluados como una estrategia publicitaria temprana y exitosa del siglo XX en su propio beneficio.
Sin embargo, no pudo repetir sus anteriores éxitos, ya que las actuaciones como tenor cobraron su precio.
Con su cuerpo atlético, su rostro atractivo y sus actuaciones electrizantes, Graveure generó una presencia escénica casi magnética.
En 1934 en la segunda película, Ein Walzer für dich (Un vals para ti es un largometraje alemán), actuó junto a Camilla Horn.
Graveure fue desviado a Inglaterra en contra de su voluntad, donde permaneció durante la Segunda Guerra Mundial.