Lotería Nacional para la Asistencia Pública

Para los antiguos habitantes de Mesoamérica el juego, además de la religión, también estaban relacionados con la diversión, la suerte y el azar, cuyos mitos y leyendas eran elementos esenciales en las sociedades.Velasco Ceballos, Romulo, LAS LOTERÍAS, México, Talleres Gráficos de la Nación, 1934.El virrey Mayorga decretó que se destinara el 2 por ciento del fondo de la Lotería a dicha institución; posteriormente, se benefició también al Hospicio de San Andrés.[cita requerida] Durante la guerra de la independencia, el virrey Félix María Calleja instituyó, en 1815, dos Loterías Forzosas, una para la capital y otra para el resto del virreinato, y de esta manera recabar fondos para combatir a la insurgencia.[cita requerida] Gracias al éxito económico que se tuvo con esta lotería, también fue posible apoyar otras grandes necesidades urgentes de la población, en una época de invasiones extranjeras y guerras civiles que mantenían al país en una situación de pobreza crónica.[6]​ En el período juarista la Lotería Nacional por primera vez fue elevada a rango constitucional.Este kiosco, por su estructura desarmable de fierro colado, al regresar a México fue colocado en la Alameda Central en donde la lotería celebró sus sorteos hasta 1908, año en el cual fue trasladado a la Alameda de Santa María la Ribera, en donde podemos admirarlo actualmente.[cita requerida] En 1934 la institución se mudó a la antigua Tabacalera (casa del Conde Buenavista, hoy Museo Nacional de San Carlos), e inició la construcción de un edificio ex profeso para albergar a la Lotería Nacional.[cita requerida] En 1968, se inició la construcción del edificio Prisma en Avenida Juárez 101, hermosa y moderna construcción que contribuyó al embellecimiento del entorno urbano de esta histórica plaza, el cual se inauguró en el año de 1970.[cita requerida] En 1991 se inauguró el edificio Jalisco como respuesta a las exigencias de modernización.[cita requerida] Es importante señalar que la Lotería Nacional para la Asistencia Pública no tiene la facultad de otorgar donaciones en forma directa, y por mandato de su Ley Orgánica, en su Artículo Segundo, los recursos excedentes que Lotería Nacional obtiene por la realización de sorteos se deben entregar íntegramente a la Tesorería de la Federación, para que ésta los destine a la asistencia pública.
Oficinas Centrales de la Lotería Nacional de México