Los ojos del sobremundo

Las lentillas causan que quienes las usan no ven el paupérrimo entorno sino el sobremundo, una vasta versión superior de la realidad donde una tapera es un palacio, una comida asquerosa es una magnífica fiesta, etc. Cugel gana una lentilla mediante engaños, y se escapa de Cutz.

Con menos oprobio, Vance lo describe como un «hombre de muchas capacidades, con una disposición a la vez flexible y pertinaz.

Casi siempre, sin embargo, Cugel ermina como víctima de su mismo truco, y «el inteligente» es hasta cierto punto, un mote irónico.

Por otro lado, Cugel muestra una relación genuina con el más generoso de los peregrinos, incluso para su propia sorpresa.

La novela presenta una trama en siete etapas porque la quinta historia tenía dos partes, y están desagregadas en el libro.