Los cipreses creen en Dios

El propio Francisco Franco, que leyó personalmente la novela, declaró públicamente: «Esto sí fue la guerra».

[2]​ A Los cipreses creen en Dios le sucederían dos secuelas: Un millón de muertos publicada en 1961, sobre la Guerra Civil, y Ha estallado la paz en 1966, sobre la posguerra y el exilio de los derrotados, pensadas desde el primer momento por su autor, por si el primero tenía éxito.

Antes de eso, había escrito en 1946 Un hombre, que fue Premio Planeta ese mismo año.

Durante cuatro años hizo cinco versiones de «Los cipreses creen en Dios», que después se convirtió en un superventas en todo el mundo.

En sus propias palabras: «Nadie lo quería comprar porque era un mamotreto de 900 páginas sobre un tema como la Guerra Civil, del que no existía el más mínimo interés.» El éxito de la novela cambiaría cuando Gironella se encontró al editor José Manuel Lara, en un hotel de Madrid, donde le enseñó la novela y le explicó el tema del libro.