Los habitantes fueron expulsados a Líbano y se convirtieron en refugiados por algunos meses antes de lograr volver clandestinamente.
También logra describir el intenso impacto emocional de la Nakba en los que sobrevivieron a su horror."
[7] La película comienza con Melia Zreiq, una anciana de Eilaboun, diciendo: "Espero que Dios traiga paz a esta tierra, y permita a los pueblos vivir juntos - una buena vida.
Pappe discute los detalles del plan, y cómo fue llevado a cabo.
Cinco de ellos fueron tomados como escudo humano, y los doce restantes fueron asesinados, cada uno en una ubicación diferente.