Lola Hoffmann

[2]​ En sus trabajos de investigación conoció a un médico chileno, Franz Hoffmann, que realizaba un postgrado en Fisiología.

A él le habló de su interés en encontrar enlaces entre psiquiatría y fisiología.

En sus estudios exploratorios descubrió y comenzó a practicar "El entrenamiento autógeno" del neurólogo alemán Johannes Heinrich Schultz, un método de autohipnosis que, mediante una serie de ejercicios fisiológicos, puede conseguir un estado similar al que se obtiene con la hipnosis exógena.

Pensaba que las relaciones paralelas eran importantes para el propio crecimiento de la pareja.

Continuaron viviendo en el mismo terreno familiar en Pedro de Valdivia Norte.

Lola pensaba que una de sus contribuciones había sido apoyar a mujeres y hombres a ser personas completas y para esto era necesario desarmar el sistema patriarcal que dominaba la sociedad.

Tótila Albert murió en 1967 y algunos meses más tarde su marido, Franz Hoffman, sufrió un ataque apopléjico que primero le paralizó el lado derecho y luego la totalidad del cuerpo.

En 1971 finalizó la traducción del I Ching (o Libro de las mutaciones), trabajo al que se había dedicado varios años.

Ella no sólo fue terapeuta hasta el año de su muerte, sino que es considerada por sus múltiples discípulos y pacientes como una gran maestra.

Lola Hoffmann creía en el cambio individual y descreía de la acción política.

En 1981 se fundó en Nueva York, la Iniciativa Planetaria para el Mundo que Elegimos y cuando en 1983, esta iniciativa llega a Chile ella decide participar y fue la oradora principal en el acto de lanzamiento.

Sus últimos cuatro años los pasó en Peñalolén en la parcela de su hija Adriana Hoffmann.

No reconocía a nadie, deliraba, se peleaba con todos, convivía en otro tiempo con sus parientes rusos.

Ella cuenta que una noche se despertó con un profundo golpe en su cuerpo, a lo largo de toda la columna, se dobló en arco hacia atrás y sintió como una caricia gigante y amable la masajeaba.

Sin embargo, volvió a experimentar un segundo golpe más fuerte que el primero.

Luego se vio tendida en una cama y sintió una presencia a su lado de la que emana cada vez más amor.