[1][2] Se distingue de la petrología, que estudia y describe (petrografía) en todos sus aspectos lo que caracteriza a los diversos tipos de rocas que existen, aunque en castellano y en francés litología se usó antiguamente como sinónimo de petrología.
Ayuda a comprender el concepto de litología la existencia de mapas específicamente litológicos, que son mapas que representan la distribución de las rocas superficiales, las que afloran (al aire) o están cubiertas solo por regolito, suelo y vegetación, o productos de la actividad humana, como edificios o carreteras.
Ejemplos significativos de tipos de relieve por causas litológicas son el relieve kárstico o los badlands; en ambos casos se requieren además condiciones climáticas o estructurales.
También son muy característicos los relieves volcánicos, pero en este caso es más por las estructuras, como los conos volcánicos, que se explican por su proceso de formación, que por un comportamiento especial de las rocas volcánicas frente a los factores que modelan el relieve.
Aunque etimológicamente la palabra litología es el nombre de una ciencia, equivalente a la palabra petrología, en su uso moderno es una metonimia, por la que se utiliza para designar lo que la ciencia ha descrito, es decir, las rocas aflorantes de un lugar.