Se ha especializado en México y las naciones andinas, sobre todo en el caso de estudio del Ecuador.
Por el contrario, considera que las políticas públicas gubernamentales de estos dos períodos plasmaron un proceso evolutivo consistente en medidas fiscales.
También sugiere que los cambios radicales del julianismo y de la misión Kemmerer al Ecuador fueron prontamente rechazados y revertidos a prácticas más moderadas tras la caída de Isidro Ayora.
De la misma manera, la historiadora ha sugerido que el escaso desarrollo del Ecuador desde sus orígenes y anterior al boom petrolero se debió a la fragmentación geográfica existente y a los recursos naturales limitados que posee.
Los grupos económicos en el poder se han repartido el control del Estado inculpando a los previos gobiernos de la fragilidad institucional y los problemas económicos precedentes sin tomar en cuenta que, usualmente, las élites políticas en los gobiernos de turno no eran exclusivamente costeñas ni exclusivamente serranas ni que las reformas implantadas no representabas cambios radicales sostenidos.