En el Oeste, los ganaderos se tomaron la justicia por su mano colgando a los que consideraban ladrones de ganado y caballos.
Para prevenir la ratificación de nuevas constituciones elaboradas durante la Reconstrucción, la oposición utilizó distintos métodos para acosar a los potenciales votantes.
Además, se impuso la ley marcial en algunos condados de Carolina del Sur, donde el Klan era más fuerte.
En Misisipi los Camisas Rojas, en Luisiana la Liga Blanca fueron los grupos que acometieron los objetivos del Partido Demócrata: suprimir el voto negro.
Su expulsión del censo electoral también les impedía ser miembros de un jurado, privilegio reservado a los votantes.
Aunque varios recursos contra estas constituciones llegaron hasta el Tribunal Supremo en los casos «Williams v. Mississippi» (1898) y «Giles v. Harris» (1903), se ratificaron las cláusulas del estado.
El Instituto Tuskegee, que posee los registros más completos, señala a las víctimas simplemente como blancos o negros.
Los congresistas republicanos del Sur intentaron proteger el derecho al voto de los negros recurriendo a tropas federales para defenderlo.
[37] En «Without Sanctuary», un libro sobre postales de linchamientos coleccionadas por James Allen, el historiador Leon F. Litwack, ganador del premio Pulitzer, escribió:
[39] En 1904, Mary Church Terrell, la primera presidenta de la National Association of Colored Women publicó un artículo en la influyente revista North American Review en respuesta al sureño Thomas Nelson Page.
Los emigrantes rurales blancos y negros se trasladaban a las ciudades sureñas, en rápido proceso de industrialización.
En 1920, la comunidad negra consiguió hacer realidad su prioridad más importante en la plataforma del Partido Republicano durante la convención nacional: el apoyo a la ley contra los linchamientos.
La comunidad negra había apoyado a Warren G. Harding en las elecciones, pero estaba decepcionada por la lentitud con que su administración trataba esa ley.
[18] En 1932, activistas contra el linchamiento como Mary McLeod Bethune y Walter Francis White hicieron campaña a favor del candidato presidencial Franklin D. Roosevelt, esperando que apoyase públicamente sus esfuerzos.
Algunos senadores republicanos, como el conservador William Borah, de Idaho, se opuso a la ley por razones constitucionales, considerando que vulneraba la Soberanía nacional.
El presidente temía que este apoyo le costara muchos votos del Sur en las elecciones presidenciales de 1936.
[52] La industrialización previa a la II Guerra Mundial funcionó como factor «palanca» para la segunda fase de la Gran Migración, que comenzó en 1940 y se prolongó hasta 1970.
Los historiadores posteriores han documentado que Truman hizo un breve intento en su juventud de unirse al Klan en 1924, cuando su influencia social se encontraba en su apogeo, promocionándose como una fraternidad.
En una reunión con el presidente Harry Truman en 1946, Paul Robeson le urgió a que emprendiera acciones contra los linchamientos.
En 1951, Paul Robeson y el Congreso de Derechos Civiles realizaron una presentación titulada «We Charge Genocide» ante las Naciones Unidas.
[55] J. Edgar Hoover, director del FBI durante varias décadas, sentía un especial temor a los efectos que pudiera tener el comunismo en EE.
Estaban investigando el incendio provocado de una iglesia negra que se utilizaba como escuela libre.
Seis semanas después, se encontraron sus cuerpos en un embalse a medio construir cerca de Philadelphia (Misisipi).
Siete hombres fueron condenados, pero recibieron sentencias leves, dos fueron puestos en libertad por bloqueo del jurado y el restante fue declarado inocente.
Por ejemplo, el FBI dio falsas informaciones a la prensa sobre Viola Liuzzo, víctima de linchamiento en 1965 en Alabama.
Aún hoy hay quien argumenta que el linchamiento sigue existiendo como una práctica enmascarada por la brutalidad policial y los vigilantismos menos notorios.
Byrd había aceptado viajar a casa con los tres hombres, que le atacaron y lo asesinaron en la parte trasera de su camión.
[59] Las autoridades locales consideraron inmediatamente este asesinato como un delito de odio y pidieron ayuda al FBI.
[63] Entre los trabajos artísticos que tratan el linchamiento, la canción "Strange Fruit" fue creada como poema por Abel Meeropol en 1939 e interpretada por Billie Holiday.
El primer juicio federal que consiguió una condena por este delito fue en 1946, aunque para entonces, la era de los linchamientos habituales había terminado.