El ligamento suspensorio del ovario, o ligamento infundíbulo-pélvico, es un repliegue del peritoneo[2] que se extiende desde el ovario hasta la pared de la pelvis.
[3] No es considerado un verdadero ligamento en cuanto a que no sostiene físicamente ninguna estructura abdominal; sin embargo, es un elemento de referencia y contiene a los vasos ováricos.
[3] Está fijado a la fosa ilíaca por arriba y atrás, llegando hasta la extremidad superior (tubárica) del ovario, al mismo tiempo fijándose en el infundíbulo de la trompa uterina y en el peritoneo del ligamento ancho.
Hay nombres diferentes para las dos regiones de este tejido.
El extremo más inferior del peritoneo cubre la abertura superior de la pelvis; en las hembras, esta región del peritoneo tiene el nombre de "ligamento ancho".