Finalmente ella descubre que podrían haber sido causadas por selenio, un veneno mortal.
Dándose cuenta de que ese acontecimiento realmente ocurrió, ella de inmediato llama entonces a la policía y les informa que Lorraine fue asesinado explicándoles también cómo lo averiguó.
Teniendo toda esta evidencia y la prueba que tenía acceso a cianuro, el Dr. Farris es arrestado, juzgado y condenado a cadena perpetua por el asesinato.
Aun así Ellen Farris nunca pudo recuperarse del envenenamiento, lo que también contribuyó más tarde a su muerte.
La película se desarrolló basándose para ello en una historia real que ocurrió.