Latrotoxinas

2006), entre ellos varios homólogos de LTXs que desempeñan un papel en su toxicidad para los insectos y crustáceos (Grishin 1998).[3]​ Ambos sexos de la especia animal sintetizan veneno, pero únicamente la hembra tiene colmillos suficientemente grandes y fuertes para penetrar en la piel humana.Por otra parte la a, b y d latroinsectotoxina actúan sobre insectos, así como la alatrocrustotoxina sobre crustáceos.[8]​ Las contracciones musculares y la fascies latrodéctica por contractura de los maseteros, puede hacer confundir el cuadro con un tétanos o intoxicación por estricnina.[5]​ Diagnóstico diferencial: Debe hacerse con apendicitis aguda, úlcera perforada, íleo, cólico biliar o renal e invaginación intestinal.Por otro lado tenemos síntomas como pancreatitis, tétanos, infarto agudo de miocardio, intoxicación alimenticia, torsión testicular.Durante el embarazo el latrodectismo puede producir síntomas y signos similares a los que se observan en la preeclampsia (dolor abdominal e hipertensión).Estas complicaciones aparecen con preferencia en niños, ancianos y en pacientes con enfermedades cardiovasculares.Otra proteína contenida – la struerabutoxina A- es muy semejante a las toxinas de las serpientes marinas.
Latrodectus tredecimguttatus.