Antiguamente Laquis ocupaba una posición estratégica en la ruta principal que enlazaba Jerusalén con Egipto.[3][4] Más tarde el rey Amasías huyó a Laquis para escapar de sus conspiradores, pero fue encontrado y asesinado.[6] El rey asirio Senaquerib sitió Laquis en 732 a. C. Desde allí, según el relato bíblico, envió a Rabsaqué, Tartán y Rabsarís con una poderosa fuerza militar, en un esfuerzo por hacer que el rey Ezequías se rindiese, mediante burlas y cartas que desafiaban a Yahveh Dios; según la Biblia, como respuesta un ángel de Dios aniquiló a 185.000 soldados en una noche.Una de las cartas, dirigida por una avanzada militar al comandante que estaba en Laquis, dice en parte:[10]Este mensaje parece indicar que Azeca ya había sido tomada pues no se veían señales de allí.